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Bienvenidos y bienvenidas a Lanza tu proyecto, el podcast donde aprendemos todo lo necesario para lanzar nuestros proyectos. Desde herramientas de marketing a diferentes estrategias de negocio.
En este episodio hablamos de combinar crear proyectos y teletrabajo, es decir, trabajando desde casa o conectados a Internet con otras personas pero sin compartir con ellas un espacio físico. Una tendencia creciente hoy en día y que debemos tener en cuenta por el ahorro que supone en cualquier proyecto. Pero que, asimismo, genera una serie de retos para los que debemos estar preparados como emprendedores.
Mis primeros nueve años de experiencia profesional me los pasé trabajando en una oficina, con unos 30 compañeros. Era la delegación comercial de Mediaset en Barcelona. Primero vivía a 15 minutos caminando del trabajo, pero con el tiempo me mudé a Sabadell, una ciudad a 30 kilómetros de Barcelona. Tren arriba y tren abajo me pasé años invirtiendo entre una hora y media y dos horas en traslados. Cada día de lunes a viernes. Pero, como suele decirse, somos seres rutinarios. Cuando empecé a emprender seguí trabajando en Barcelona, con traslados en tren cada día. Era como si mi cuerpo me pidiese seguir trabajando fuera de casa.
Pero al cabo de los años empecé a teletrabajar, antes estuve unos años en un coworking, ya que me fui a vivir a Girona una temporada. Hasta tal punto estaba enganchado a trabajar desde un espacio alejado de mi hogar que no pude evitar buscar un coworking en dicha ciudad. Aunque al final llegó el día, la paternidad me hizo probar el trabajar desde casa, y llevo más de 5 años en esta nueva etapa. Con sus más y sus menos, sus pros y sus contras, hoy vamos a analizar el teletrabajo a fondo. Empezando por los puntos positivos de trabajar desde cualquier lugar conectado en remoto.
Crear proyectos y teletrabajo: Puntos positivos
El primer punto positivo de teletrabajar ya lo hemos comentado, la reducción del tiempo de traslados. Pensad en mi caso, una hora y media por jornada que me ahorro. Y el típico argumento de que se aprovecha el tiempo para leer o trabajar no lo deberíamos contemplar. Ese tiempo de traslados, si trabajas por cuenta ajena lo estás perdiendo. Es un tiempo dedicado al trabajo indirectamente, pero ni se cobra ni se aprovecha como se debería. Y si trabajas para tí mismo tampoco es un tiempo aprovechado, aunque estés trabajando con el portátil en un tren nunca es lo mismo que estar trabajando en condiciones. Y si ya usas transporte privado es un tiempo totalmente improductivo.
Teletrabajando puedes aprovechar ese tiempo para invertirlo en tu jornada o en cualquier otra tarea. Puedes meditar, llevar a tus hijos al colegio, hacer la compra, salir a correr, ir al gimnasio, leer un libro o dormir más. Y en mi caso hablamos de una hora y media pero, ¿cuánto tardáis o tardabais vosotros en llegar a vuestro sitio de trabajo? Porque hay personas que invierten hasta dos horas o más en llegar a su trabajo y volver del mismo. Una locura si te lo paras a pensar. Pero sigamos, que las ventajas de teletrabajar no se acaban aquí.
La segunda ventaja, muy relacionada con la anterior, es el ahorro en dinero que supone el trabajar desde casa. Para ir y volver cada día al trabajo uno gasta dinero, en comprar su billete de transporte público o pagar combustible o electricidad para su vehículo. Incluso en ocasiones uno puede ahorrarse hasta tener vehículo si trabaja desde su propia casa. Aunque teletrabajar no sólo se aplica a trabajar desde casa, vamos a entender que en la mayoría de casos el teletrabajo se aplica a esa condición de trabajo desde el propio domicilio.
Pero hay más ventajas, como por ejemplo el aumento de la calidad de vida. Si teletrabajas desde tu casa podrías hacerte la comida cada día, o como mínimo, vas a gastar menos dinero en comer fuera de casa si es que tu jornada es a tiempo completo. Eso te permite comer de forma más saludable y también más barata. Además hay otras ventajas como la posibilidad de dormir un rato más por la mañana o echarte una siesta si tu cuerpo te lo pide.
No siempre podemos estar al 100% a nivel de productividad, y teletrabajar te permite adaptarte mejor al ritmo de tu propio cuerpo y tu propia mente. Eso siempre que puedas controlar tu propia jornada, algo que no siempre es posible aunque teletrabajes. Hay que dejarlo claro. En cualquier caso, aunque no controles tu jornada, el trabajar desde casa te permite aumentar más fácilmente tu calidad de vida.
Vayamos ahora a la conciliación, teletrabajar te permite mejor conciliar tu vida personal con la profesional. Sin ningún tipo de duda. La flexibilidad que te otorga el poder estar en casa para atender tus hijos en un momento dado, para hacer la compra semanalmente o tomarte el tiempo de encargarla online, para poder preparar la cena tranquilamente sin prisas un miércoles por la noche. Los ejemplos son muchos.
Claro que cada caso es un mundo, y una persona que trabaja en jornada intensiva de 8:00 a 16:00 horas y a 5 minutos de su casa no tendrá la misma situación que otra que trabaja a jornada partida y está fuera de 9:00 a 19:00 horas, trabajando a 75 minutos de su casa.
Pero seguimos, que hay más ventajas oiga. Una de las ventajas más importantes es el aumento de la productividad. Y es que, aunque parezca mentira, teletrabajar suele aumentar la productividad y no reducirla como se podría llegar a pensar. Como siempre, cada caso es un mundo, pero en términos generales la productividad aumenta si uno trabaja desde su domicilio o un sitio remoto. En primer lugar, uno puede montar el espacio de trabajo a su gusto, y eso hace que trabajes mejor. En segundo lugar, uno puede centrarse mejor en las horas que dedica al trabajo, al no tener que estar pendiente de tareas extra laborales que no puede realizar por estar alejado de su domicilio.
Mi sitio de trabajo tiene un póster de Pearl Jam, banda de grunge de los 90, con unas olas y unos surfistas, en tonos azulados. Me encanta este póster y tenerlo delante. A la izquierda tengo una ventana grande y puedo mirar el cielo siempre que quiero. Tengo mucha luz natural y otros objetos que me gustan. Como dos figuras de Masters del Universo de coleccionista o dos figuras de Lego (uno es Luke Skywalker y el otro Obi Wan Kenobi). Trabajo con mi MacBook Pro con un soporte para alzarlo y tengo mis dos focos y mi micro para grabar mis vídeos de YouTube. Estoy a gusto en mi espacio, que mezcla funcionalidad y una decoración muy personal.
Pero el otro tema que aumenta la productividad es todavía más importante. El saber que puedo ir al colegio de mi hijo si pasa algo, que puedo hacer la compra si nos falta algo en casa, que puedo ir al gimnasio en 5 minutos si lo necesito, todo aquello que puedo hacer de forma ágil y rápida por el hecho de trabajar desde casa me permite concentrarme más en el trabajo.
En conclusión, no tengo que estar pensando en lo que tengo que hacer fuera del trabajo porque si necesito hacer algo puedo dedicarme a ello inmediatamente. A no ser que esté en una reunión, pero incluso en esas ocasiones puedo atender alguna urgencia si me es indispensable, comunicándolo a mis interlocutores.
Hay empresas que entienden que este aumento de productividad les conviene. Y, por ejemplo, ponen servicio de guardería en sus sitios de trabajo o permiten que la gente trabaje desde casa unos días de cada semana. Son fórmulas inteligentes para dejar que la gente pueda trabajar mejor, sin tener los inconvenientes del teletrabajo a tiempo completo, que también los hay. Ahora vamos a repasar algunos de estos inconvenientes.
Para teletrabajar es necesario tener un despacho o zona acondicionada dentro del hogar, si es que teletrabajas desde tu domicilio. En caso contrario acabarás teletrabajando desde la cocina, desde el salón o en zonas que puedan ser comunes para otras personas que convivan contigo. Y eso es un grave error. Aunque teletrabajes desde tu casa eso no significa que no debas tener un espacio especialmente dedicado al trabajo. Es importante para poner barreras psicológicas entre lo que es trabajo y lo que no lo es. De otro modo te vas a encontrar pensando en el trabajo todo el día, en cambio tener un espacio físico sólo destinado al trabajo te ayuda a poner ese tipo de barreras.
Sigamos hablando de inconvenientes, los posibles problemas de salud mental ligados al teletrabajo. Uno de ellos es el generado por la reducción de interacción social que se produce cuando trabajas desde casa. Aunque en ocasiones sea mejor no tener compañeros de trabajo que tener según cuáles, somos seres sociales y necesitamos socializar para estar bien. Por eso es importante que al teletrabajar uno sea consciente de que va a tener que dedicar tiempo a sus relaciones sociales fuera del trabajo. Quizás con mayor intensidad que antes.
También es interesante, si es posible, que uno tenga contacto con grupos de personas en su trabajo. Yo tengo la suerte de ser consultor y estar en contacto con clientes constantemente. Pero hay trabajos que no lo ponen tan fácil, como por ejemplo trabajos técnicos como el diseño gráfico o la programación. No digo que estos perfiles no tengan reuniones con clientes, pero suelen ser mucho más cortas y residuales que las que tienen los consultores que estamos constantemente reuniéndonos con clientes.
Sigamos con otro inconveniente, la posible falta de salud física. Cuando uno teletrabaja en muchas ocasiones no se mueve de delante del ordenador durante horas. Y en ocasiones este sedentarismo puede ser muy negativo si no se compensa con ejercicio regular de forma semanal. Yo entre mis 35 y mis 45 años he estado saliendo a correr 3 veces por semana. Y ahora a mis 45 años he vuelto al gimnasio, cada día de lunes a viernes, además de seguir saliendo a correr mis 3 veces por semana. Lo he hecho para mantenerme fuerte, cosa que es necesaria con la edad, pero también porque me ayuda mucho a concentrarme y mantener la fortaleza mental en mi día a día.
Y es que la frase de mens sana in corpore sano no es ninguna broma. Si mantienes tu cuerpo activo vas a tener una mente más tranquila y sana. Por eso al teletrabajar es tan importante no dejarse llevar por la inercia del sedentarismo. La reducción de traslados también implica que uno camina mucho menos, y quizás si uno se descuida vaya sumando días sin salir de casa en ningún momento. Todo este tipo de rutinas extremas van a reducir la salud del cuerpo y la mente. Debido a ello es básico tomarse muy en serio el entrenamiento físico cuando uno teletrabaja.
Acabamos con una última desventaja del teletrabajo y es la imposibilidad de desconectar. Trabajar desde casa en remoto puede generar que te sea imposible dejar de trabajar. Es cierto que hoy en día, con las nuevas tecnologías, eso te puede pasar también aunque no teletrabajes. Pero trabajando desde casa es mucho más fácil que no desconectes. Sales de tu despacho en casa y te pones a cocinar la cena, pero tu mente sigue atada a esa última reunión de trabajo. ¿Os suena? Seguro que a quien teletrabaja le suena mucho esta situación habitual.
Para evitar este problema es importante darse descansos habituales en la jornada y permitirse tener tiempo para la descompresión. Una vez se acaba la jornada será importante tener tiempo para acomodarse a dejar de trabajar. También es importante tener micro pausas durante la jornada, para que tu mente pueda relajarse y así evitar entrar en una dinámica nociva para la concentración y la productividad.
¿Y vosotros, qué opináis del teletrabajo? ¿Habéis probado esta fórmula en vuestra profesión? ¿Os dejan hacerlo en vuestra empresa? ¿O sois emprendedores y os habéis animado a trabajar desde casa? Comentamos lo que queráis.
Y así llegamos al final de otro episodio del podcast. Como siempre, mil gracias por estar ahí, al otro lado del micro.
Os leo en los comentarios de YouTube y en los mensajes que me enviéis a través del formulario de mi web. Y, por supuesto, recordad que en vanacco.com (con v y dos c) encontraréis cursos y la mejor información fresca para lanzar vuestros proyectos. Nos vemos el próximo lunes a las 11:11 horas.
Saludos y ¡felices lanzamientos!
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