¿Qué relación hay entre shopping y consumo para explicar el comportamiento del consumidor? Vamos a verlo en esta clase del curso de Comportamiento del consumidor. Os damos la bienvenida a la sección dedicada a los cursos online para usuarios premium de vanacco.com. Cursos online que van desde lo más básico a un nivel avanzado. Ya tienes a tu disposición un total de 98 cursos y 1040 clases.
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Esta es una clase del curso de Comportamiento del consumidor dedicada a realizar una explicación de la relación entre shopping y consumo en el contexto del comportamiento del consumidor como aspecto relevante para el lanzamiento de proyectos y la generación de ventas. A lo largo de las 12 clases del curso conoceremos de primera mano ejemplos de campañas y herramientas en tiempo real.
Introducción a la relación entre shopping y consumo
En pleno siglo XXI, el fenómeno del shopping —y cómo este se integra en el proceso de consumo— constituye un pilar clave para comprender el comportamiento del consumidor en un mundo digitalizado. Con “shopping”, no nos referimos únicamente al acto de comprar, sino a toda la experiencia en línea o híbrida en la que el consumidor investiga, compara, siente, decide y finalmente adquiere productos o servicios.
Esta ventana digital (o semidigital) es una oportunidad para que tu proyecto sea visible y relevante en todo momento, porque cada vez que un consumidor se activa para comprar, hay que estar en su mente. No basta con esperar que descubra tu marca: hay que anticipar sus necesidades informativas, emocionales y racionales, y ofrecer contenido que guíe su camino hacia la venta.
Cuando hablamos de consumo, nos referimos al uso real y la satisfacción del cliente con lo que ha adquirido. El contenido que generes (artículos, vídeos, guías, redes sociales, newsletters…) debe servir para reducir la distancia entre el momento en que alguien siente interés y el momento en que realiza la compra. Así, “shopping y consumo” no son actividades aisladas, sino que forman un ciclo dinámico: el contenido atrae a los “shoppers”, los educa y convence, y luego esos compradores se convierten en consumidores que, idealmente, regresan, recomiendan o apoyan futuras iniciativas.
Fase de toma de consciencia y shopping
En la fase de concienciación, los consumidores aún no tienen una intención de compra concreta, pero pueden estar haciendo “shopping ligero”: navegando, descubriendo marcas, comparando ideas. Aquí es donde el contenido es especialmente poderoso. Publicar artículos, blogs, vídeos o posts en redes sociales que hablen de tendencias, problemas comunes y soluciones ayuda a posicionar tu proyecto como una opción viable.
Además, en esta fase es fundamental ser visible donde los consumidores “hacen shopping mental”: motores de búsqueda, redes sociales, plataformas de contenido. Según estudios sobre el análisis del consumidor en la era digital, muchos usuarios inician su recorrido en buscadores (search) antes de decidir un canal de compra, lo que subraya la importancia de estar presente desde el inicio.
El contenido debe tener un enfoque educativo y aspiracional: explicar por qué tu producto o servicio es relevante, cuáles son sus beneficios, y construir una narrativa emocional que conecte con los valores del consumidor. Esto también refuerza la economía emocional digital, donde las decisiones de consumo están muy influenciadas por las emociones.
Fase de consideración y shopping
En la fase de consideración, los consumidores ya están comparando activamente alternativas. Aquí, el shopping se convierte en una acción más deliberada: buscan especificaciones, reseñas, opiniones, demostraciones o casos de uso.
El contenido que mejor funciona en esta etapa incluye comparativas, guías detalladas (cómo elegir, cómo usar), estudios de caso o testimonios. Es fundamental ofrecer transparencia sobre características, precio, sostenibilidad, proceso de entrega o valor agregado, porque esos factores influyen mucho en la percepción de utilidad y confianza. Por ejemplo, en el comercio electrónico, la facilidad de uso percibida, la utilidad percibida y la confianza son determinantes en la intención de compra.
Además, la personalización juega un papel decisivo: los usuarios valoran que les muestres contenido relevante para ellos (sus intereses, su uso, su presupuesto). Como apuntan estudios sobre el comportamiento del consumidor online, la personalización y el valor (en términos de tiempo, esfuerzo y coste) son ejes psicológicos clave.
Fase de compra y shopping
Cuando el consumidor entra en la fase de compra, está listo para tomar acción: añadir al carrito, realizar el pedido, decidir el método de pago. En este momento, la experiencia de shopping debe ser fluida, confiable y emocionalmente satisfactoria para convertir la intención en acción.
Desde la perspectiva del contenido, es útil ofrecer apoyo inmediato: preguntas frecuentes, políticas claras de devolución, garantías, tutoriales de uso o testimonios de clientes pueden reducir la fricción. Además, elementos como la urgencia (ofertas por tiempo limitado) o la prueba social (cuántas personas ya han comprado o respaldado) pueden impulsar la conversión.
En el contexto digital, el diseño de la plataforma importa: una experiencia de compra optimizada (app móvil, web responsive, proceso de pago sencillo) refuerza la percepción de valor. Según estudios del comercio electrónico, uno de los grandes atractivos del shopping online es la comodidad y la eliminación de barreras de tiempo y espacio.
Fase de retención y shopping
Una vez realizada la compra, el ciclo no termina; empieza la fase de retención. Aquí, tu proyecto debe seguir presente en la mente del consumidor para asegurar que vuelva a hacer shopping contigo en el futuro.
El contenido poscompra es clave: newsletters con consejos, actualizaciones de productos, contenido de acompañamiento, programas de fidelización o comunidad. Si logras construir una relación emocional más allá de la transacción, fomentas un consumo recurrente. Además, en muchos contextos, compartir una experiencia positiva (reseñas, testimonios, contenido generado por usuarios) ayuda a amplificar tu marca y atraer a otros compradores.
Este “shopping constante” (aunque no siempre para comprar de nuevo) refuerza la conexión con el consumidor: cada interacción es una oportunidad de consumo futuro. Además, en la economía emocional digital, las emociones generadas tras la compra (satisfacción, orgullo, pertenencia) pueden ser un motor muy potente para la retención.
Fase de apoyo y shopping
La fase de apoyo (o advocacy) interviene cuando los consumidores se convierten en embajadores de tu proyecto. Es aquí donde el puente entre shopping y consumo se transforma en un ciclo que alimenta la visibilidad.
Los usuarios satisfechos pueden compartir su experiencia, recomendar tu marca, crear contenido, participar en comunidades o incluso convertirse en clientes recurrentes que apoyan lanzamientos futuros. Generar contenido que incentive este tipo de acciones —como llamados a compartir, programas de referidos, co-creación— es esencial para amplificar tu proyecto.
Además, en algunos modelos (como el crowdfunding), los clientes se convierten en seguidores activos que no solo consumen sino que “apuestan” por ti, y esto refuerza la visibilidad y credibilidad frente a nuevos clientes.
Ejemplos de campañas y la relación entre shopping y consumo
Para ilustrar cómo “shopping y consumo” se entrelazan en campañas reales, es muy útil mirar al crowdfunding, donde cada acción de compra (pledge) es simultáneamente una forma de apoyo y una ventana al consumo futuro. Aquí algunos ejemplos de campañas en Kickstarter que demuestran esta relación, y que no son las más famosas típicas:
Veamos ejemplos de proyectos con posible shopping y consumo
Simprella – Umbrella Reimagined: esta campaña propone un paraguas de bolsillo, de tercera generación, con diseño compacto y tecnológico. Aquí los clientes realizan una acción de compra al apoyar el proyecto, pero su aportación no sólo representa consumo, además representa el participar de la comunidad alrededor del producto.
Orbitkey Daily Tote System: se trata de un sistema modular de bolsa para profesionales urbanos, pensado para trabajo, ocio e intermedios. La campaña convence a través del diseño, funcionalidad y sostenibilidad, conectando con consumidores que valoran tanto la estética como la practicidad.
Pro Tripod by Peak Design: un trípode profesional diseñado para fotógrafos y creadores de contenido. Quienes participan en la campaña actúan como compradores anticipados, porque anticipan el deseo de poseer algo profesional y duradero; su compra anticipada es también un voto de confianza en el diseño y la marca.
Bob, The New Way to Wash: esta campaña propone un sistema de jabón corporal recargable (barras de “Bob bars”) con enfoque en sostenibilidad. Aquí se ve claramente cómo el contenido (qué es, por qué es más ecológico, cómo funciona) ayuda al consumidor a decidir apoyar y consumir.
SUPERBANK – Compact 130W 20000 mAh PowerBank: una batería externa potente, diseñada para portátiles y dispositivos exigentes. En esta campaña, los clientes compran por adelantado, y su decisión se basa en la utilidad, el diseño y la innovación, lo que demuestra cómo el shopping (la decisión de aportar) y el consumo (recibir un producto) van de la mano.
La Vidrioteca – Diseño sostenible de vidrio reciclado: proyecto que da una segunda vida a botellas de vidrio, transformándolas en objetos de diseño creativo. Aquí el consumo no es solo funcional, sino simbólico: los compradores participan de una filosofía sostenible, lo que les conecta emocionalmente con el proyecto.
Conclusión
La relación entre shopping y consumo es inseparable cuando hablamos del comportamiento del consumidor moderno. Entender cómo se activa un comprador, cómo lo educamos con contenido y cómo transformamos ese interés en acción de compra y luego en lealtad es esencial para cualquier proyecto que quiera generar ventas —ya sea un ecommerce tradicional o una campaña de crowdfunding.
En cada fase del ciclo —conciencia, consideración, compra, retención y apoyo— el contenido estratégico y optimizado juega un papel decisivo. Y al aplicar estos principios también en plataformas como Kickstarter, no solo captas compradores, sino que construyes una comunidad de consumidores comprometidos.
¿Qué podréis encontrar en esta clase del curso online?
En esta clase del curso podréis aprender lo siguiente.
- A definir la relación entre shopping y consumo.
- La conexión entre las diferentes fases de consumo y el shopping.
- A aplicar las claves de la clase a cada proyecto.
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