¿Hacer una campaña en Kickstarter o buscar inversión privada para un proyecto? Es una pregunta muy recurrente, son alternativas que habitualmente se confunden pero que, bien identificadas, son compatibles. Hoy veremos 3 claves para decidir el camino correcto para vuestros proyectos. ¿Empezamos?
En primer lugar os comento que mi fuente de inspiración ha sido este artículo del Medium de Kickstarter. Como suelo hacer he analizado el contenido y desgranado 3 claves interesantes. ¡Vamos a verlas!
Tengo que hablar con inversores, ¡pásame un vídeo resumen!
Si es por ese motivo no puedo negarme, ¿pero ya tienes claro si no es mejor hacer una campaña en Kickstarter antes? En cualquier caso, vamos allá. Como siempre, aquí os presento el vídeo resumen, fresco y recién sacado de mi vlog. ¡Vamos a verlo!
Primera clave: Racionalidad vs. emoción
Empecemos con un ejemplo, claro y directo. Vytrus Biotech, una empresa de biotecnología, realizó una campaña de crowdfunding de inversión con gran éxito, recaudando más de 600.000 euros. Pero esa no fue su primera campaña. Antes había realizado otra campaña de crowdfunding de recompensa, para validar un producto con mucho potencial, Vytrus Hair. ¿Por qué llevó a cabo dicha estrategia? ¿Y qué diferencias hubo en el enfoque de ambas campañas? Lo veremos.
La primera campaña, la de recompensa, tuvo un lenguaje totalmente emocional. Atrayendo al paciente potencial de un tratamiento para regenerar el cabello. Vytrus Hair se convirtió en un éxito para una empresa que demostró que había mercado para uno de sus primeros productos. Y eso, lógicamente, atrajo a la inversión.
La segunda campaña tuvo un lenguaje mucho más racional, atendiendo a números y también al éxito cosechado en la primera campaña. De ese modo se pudo motivar a 70 inversores para llegar a la cantidad de 601.158€ de inversión de la ronda. Es interesante observar los vídeos de campaña de la primera y segunda campaña para observar más a fondo la diferencia en los discursos.
Segunda clave: Compatibilidad
Remidi es un ejemplo interesante de la compatibilidad que puede haber entre el crowdfunding de recompensa y el mundo de la inversión. En concreto estos creadores realizaron en paralelo su campaña de crowdfunding en Kickstarter y su búsqueda de inversión. Es una práctica extrema que yo no recomiendo, pero sin duda es una muestra clara de la compatibilidad entre ambos mundos. Analicémoslo más a fondo.
Una campaña de crowdfunding de recompensa enfocada a la venta anticipada de un producto, servicio o experiencia no es más que una validación de un modelo de negocio. Las recompensas son el producto, servicio o experiencia en cuestión. Y los precios que ponemos a dichas recompensas validan nuestra propuesta de precios y de valor.
El crowdfunding de recompensa usado como acabamos de contar es la mejor herramienta de validación de mercado que existe. Y los inversores lo saben. Por eso tras una campaña de recompensa de éxito es mucho más fácil conseguir inversión privada para un proyecto. Hacer una campaña a la vez que buscamos inversión no es la mejor de las prácticas ya que una cosa puede descentrarnos de la otra. Pero en cualquier caso la compatibilidad entre ambas herramientas es evidente.
Tercera clave: Seguimiento
Scribit es un proyecto muy interesante que os recomiendo que analicéis a fondo. Pero al margen del proyecto hay un hecho interesante de su campaña en Kickstarter que cabe analizar a fondo. Resulta que no pudieron entregar el 100% de las recompensas a tiempo, pero su gestión de la crisis fue excelente. Sobretodo por el seguimiento realizado y la comunicación con sus mecenas.
Las últimas respuestas del equipo de Scribit son de hace pocos días, siguen respondiendo puntualmente a sus mecenas. La comunicación constante con mecenas es igual de importante que la que hay que hacer con los inversores. Al final ambos mundos, el del crowdfunding de recompensa y el de la inversión privada, tienen este punto en común.
En plataformas de crowdfunding de inversión como Crowdcube, The Crowd Angel, Seedrs o Capital Cell también vemos esta tónica cuando los emprendedores llevan a cabo buenas prácticas. Y cuando hablamos de inversión tradicional, sin campaña de crowdfunding, la máxima se mantiene, hay que comunicarse con los inversores de forma regular.
Recuerda
- El discurso en Kickstarter es más emocional, el de la inversión más racional.
- La búsqueda de inversión y Kickstarter son herramientas compatibles.
- El seguimiento es tan importante tras una campaña como tras recibir inversión.
¿Con ganas de más?
No te pierdas los cursos online de crowdfunding con novedades todas las semanas. Hay clases de niveles básico, intermedio y avanzado para ayudarte a mejorar los resultados de tus campañas.
Deja una respuesta