Libertad financiera, si no has escuchado este término es que vives bajo tierra. Veremos hasta qué punto es realista pensar en alcanzar un estadio en que el dinero trabaje para ti. Y qué contrapartidas tiene este escenario ¡Empezamos!
Analizaremos herramientas y proyectos. Con claves para que las podáis usar con vuestros proyectos. Y así mejorar su lanzamiento. ¿Os parece bien? ¡Pues empezamos!
Índice
Libertad financiera: ¿Es posible alcanzarla?
En primer lugar, entendemos libertad financiera aquel estadio en que un individuo puede cubrir todas sus necesidades económicas sin necesidad de realizar ninguna actividad. Es importante que entendamos de entrada que el concepto de libertad financiera no es generar dinero sin hacer nada. Esto es una simplificación de la realidad. Pongamos el acento en la cobertura de todas las necesidades de un individuo. Y, ahora sí, empecemos.
Clave 1: Los ingresos pasivos y la libertad financiera
La libertad financiera, como hemos visto, tiene tanto que ver con los ingresos como con las necesidades financieras que uno tenga. Es decir, una persona con menores necesidades lo tendrá, en principio, más fácil para lograr la libertad financiera. En cualquier caso, la segunda parte de la historia es que se deben generar ingresos de forma pasiva, es decir, sin hacer acciones o haciendo las mínimas posibles.
Los ingresos pasivos van de eso precisamente, de generar ingresos con un trabajo mínimo para crearlos y mantenerlos. Y atención a lo último, cuidado con el mantenimiento de los ingresos porque no es algo trivial. Si, por ejemplo, tenemos propiedades en alquiler (qué suerte la nuestra) deberemos gestionar la propiedad, por ejemplo, la comunidad de vecinos, las reparaciones y otras incidencias posibles.
En segundo lugar, las ganancias deben ser estables o crecientes, nunca decrecientes. Ya que si entramos en decrecimiento de los ingresos pasivos, éstos van a tender a desaparecer. A no ser que cambiemos la tendencia. Por lo tanto, necesitamos generar unos ingresos que podamos gestionar de tal forma que los hagamos mantenerse o crecer de forma estable.
Y, para acabar, cuidado con la gestión y su coste. Es decir, nos hará falta tener un equipo o controlar muy bien los gastos asociados a gestionar los ingresos pasivos. Es fácil hablar de ingresos pasivos cuando uno ha heredado 3 pisos para alquilar en el centro de una ciudad. Pero crear se patrimonio desde cero y mantenerlo en el tiempo es, como mínimo, algo que requiere esfuerzo, ¿verdad?
La libertad financiera y los ingresos pasivos
La libertad financiera no es fácil de obtener. Va de ingresar para lograr cubrir necesidades, y por lo tanto depende tanto de los ingresos como de los gastos que tengamos para mantener nuestro estilo de vida.
- Cuidado con el mantenimiento de los ingresos, no es algo fácil.
- Los ingresos pasivos deben ser crecientes con el tiempo o mantenerse estables.
- Hay que tener en cuenta la inflación y otros aspectos que merman los ingresos.
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Clave 2: La recurrencia y la libertad financiera
Captación, retención y fidelidad, tres conceptos que deben llevarnos a la recurrencia de ingresos. Porque sin recurrencia no hay libertad financiera que valga. Necesitamos ingresos, como hemos visto, que sean crecientes en el tiempo y que requieran poco o nulo esfuerzo por nuestra parte. Lo de nulo ya os digo que es imposible, aunque te lo vendan los gurús de turno.
Para captar demanda de cualquier servicio o producto que genere ingresos pasivos hace falta una propuesta de valor. Cuidado con eso. O tenemos una marca personal fuerte, o un proyecto con una marca que goce de buena reputación. De otro modo será complicado generar recurrencia en un modelo de negocio para perseguir la libertad financiera que (en teoría) es posible lograr.
Aunque, cuidado, tenemos la opción que comparten algunos salvadores, el trading o la compraventa de instrumentos financieros. Ahí queríamos llegar, ¿cierto? Bueno, igual vosotros, yo no. Pero la cosa es que el trading parece la promesa perfecta, haz un curso de unas cuantas horas y ponte a operar en bolsa para forrarte eternamente. Parece fácil, pero no lo es, así que volvamos a lo de la propuesta de valor.
Retención, recordad esta palabra. Si volvemos al mundo real, el de los activos que generan ventas de forma sostenida y sin demasiado esfuerzo por nuestra parte, comprendemos que no es fácil ni crear este sistema de ingresos ni retener a la demanda. En un modelo tipo Netflix lo vemos claro, retener a la audiencia que paga requiere un esfuerzo continuado para ofrecer un series de calidad y variadas que se estrenan cada mes.
La recurrencia como modelo de negocio
La retención y la fidelidad de la clientela es clave si queremos un modelo de negocio que genere ingresos pasivos. Si somos de los que preferimos hacer trading, cuidado, no es un camino fácil y está lleno de gente que vende mucho humo.
- Hay que ser capaz de captar clientes para un modelo recurrente.
- Los ingresos pasivos estables o crecientes también requieren de retención.
- Optar por un modelo de compraventa de instrumentos financieros no es fácil.
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Clave 3: Pros y contras de la libertad financiera
Vale, ya lo tienes, eres libre financieramente, pero ¿y ahora qué? Si alguien se piensa que lograr la libertad financiera es el principio de la calma, no está en lo cierto. Hay que mantener a salvo el castillo, aquello que con sangre, sudor y lágrimas hemos construido. Y eso tiene un peso sobre nuestras espaldas. ¿Es más libre quien más ingresos tiene o quien menos gasta? ¿Qué opináis?
Ingresos y gastos, cuidado con esto. Para lograr la libertad financiera debemos perseguir la excelencia en la gestión de este binomio. Controlar lo que ingresamos, pero también lo que gastamos. Por lo hablar de los imprevistos que podemos tener en el camino. Cuanto más pronto lograr la libertad financiera más años deberás mantenerla. Y eso no es algo sencillo en un entorno tan dinámico como el que tenemos.
En cuanto al ocio, ¿de verdad alguien con libertad financiera puede tirarse a la bartola? No, no puede. Quizás puede tener más ocio que la media de la población, pero la calma mental no será fácil de lograr. Por no hablar de la salud mental, que requiere una cierta actividad al igual que la física. Aunque pudiéramos despreocuparnos totalmente de mantener los ingresos pasivos, que no es así, está por ver si eso sería saludable para nosotros.
Y es que el miedo a perder lo que tenemos nos define como humanos. Estamos programados para la supervivencia y, por tanto, también para defender los recursos que tenemos. Por eso habrá que contar con más y más recursos para gestionar los ingresos pasivos cuando más altos deban ser. Así que el control del binomio de ingresos y gastos pasa también por controlar hasta qué punto queremos hacer crecer el castillo.
La otra cara de la libertad financiera
Defender una posición nunca es fácil. Y logrando la libertad financiera nos situaremos en una situación que deberemos defender. En ocasiones, ir el segundo en una carrera de fondo es mejor que ser el primero, para así adelantar en el último minuto.
- Controlar los gastos es tan importante como lograr ingresos.
- La calma mental no es fácil cuando hay que gestionar la libertad financiera.
- El miedo a perder puede ser algo complicado de asumir.
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Cómo conseguir (si quieres) la libertad financiera
En primer lugar, como hemos visto, la libertad financiera va de cubrir necesidades con unos ingresos pasivos que requieran poca o nula actividad por nuestra parte para mantenerse en el tiempo. Habiendo leído la anterior frase ya de entrada podemos comprender que la libertad financiera no es algo fácil de lograr. Pero es que tampoco es algo fácil de mantener a largo plazo.
La clave está en gestionar bien los ingresos y controlar los gastos. Quizás tiene más libertad financiera quien vive en una camioneta aparcado en una playa que quien tiene 5 propiedades en la Costa Brava. Por eso la libertad financiera no es algo posible para todo el mundo, ni todo el mundo puede mantenerla a largo plazo. Ya que, además, tendremos que gestionar bien otros recursos para lograrla.
Recursos como los financieros, es decir, saber invertir el dinero para generar más dinero. O los recursos humanos, para que sean personas quienes nos gestionan el patrimonio para que nosotros podamos disfrutar de la tan ansiada libertad. Una libertad que, aunque tengamos, quizás no nos deja dormir tan plácidamente por las noches. Ya que, en realidad, estamos programados para estar alerta y sobrevivir como humanos que somos.
Recuerda
- La libertad financiera es complicada de conseguir y de gestionar.
- Hay que gestionar ingresos y gastos de forma sabia para lograrla.
- Quizás ni logrando la ansiada libertad financiera seremos realmente libres.
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Enlaces de interés
- Robert Kiyosaki en Wikipedia.
- Padre rico, padre pobre en Wikipedia.
- Definición de libertad financiera en Wikipedia.
- Ingresos pasivos en Wikipedia.
- El trading y la libertad financiera.
- Estafas de las cuentas de trading ligadas a cursos.
- Proyectos sobre libertad financiera en Kickstarter.
- Un juego de mesa sobre libertad financiera.
- Transforma tu mente, ¿y tu cuenta corriente?
- App y e-book para aprender trading.
- Motívate con esta camiseta, ah, no, que no se financió.
- 12 pasos para la libertad financiera (y fracasar en crowdfunding).
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