Hoy presento el veinteavo capítulo de la guía básica de crowdfunding que tendrá un total de 30 entregas que recopilaré en un e-book. La motivación de esta guía es acercar el crowdfunding a todo el mundo y nace fruto del desconocimiento general que observo en mi día a día de ejercicio profesional como consultor en crowdfunding desde el 2011. De poco sirve compartir conocimiento experto si el conocimiento de base no está bien consolidado.
Sin más vamos a por el veinteavo capítulo de esta guía centrado en explicar la recepción de los fondos recaudados en una campaña de crowdfunding, qué implicaciones fiscales tiene, cuáles son las acciones que deben llevarse a cabo para gestionar con éxito dichos fondos recaudados y qué se debe tener en cuenta para no derrochar dichos recursos.
¿En qué consiste la recepción de la recaudación de fondos vía crowdfunding?
Una vez finaliza una campaña de crowdfunding, si la plataforma donde se ha publicado funciona bajo el sistema todo o nada y ha alcanzado el 100% del objetivo como mínimo, el creador recibe los fondos que se hayan recaudado. Si la plataforma funciona bajo el sistema todo cuenta se reciben sea cual sea el porcentaje del objetivo que se haya alcanzado. Asimismo si la campaña se ha publicado en una página web propia, habitualmente el cobro a los mecenas y la posterior recepción de fondos debería realizarse siguiendo el mismo procedimiento.
¿Cuánto se tarda en recibir los fondos recaudados?
Como siempre digo, el crowdfunding no es el camino rápido para obtener fondos ya que éstos se reciben meses después de iniciado el proceso de diseño de la campaña. Como mínimo hay que contar un mes y medio de diseño, medio mes de precampaña y el mes o mes y medio que puede durar la campaña. Por lo tanto estamos hablando de un plazo de tres meses como mínimo desde que se inicia el diseño de la campaña hasta que se reciben los fondos recaudados.
Existen casos extremos como el de Shenmue III una campaña que tardó 3 años en ser diseñada, planificada y ejecutada.
¿Qué cantidad se recibe finalmente?
Hay una serie de costes de campaña y posibles incidencias que deben tenerse en cuenta ya que se descuentan de la cantidad recaudada. Hablo de comisiones de plataforma y sistema de pago, el coste de transacciones fallidas y también de otros costes adicionales que veremos a continuación.
En primer lugar se descontará la comisión de la plataforma
La comisión de la plataforma varía, como vimos en el capítulo de la guía dedicado a los costes del crowdfunding, pero suele situarse en el 5% de la cantidad recaudada. Dicha comisión es a riesgo, es decir que sólo se cobra si se recaudan fondos en la campaña.
La comisión de la plataforma se descontará de la cantidad recaudada y, por tanto, el ingreso efectivo de fondos siempre se verá reducida en la proporción que marque dicha comisión.
En segundo lugar se descontará la comisión del sistema de pago
Lo mismo ocurre con la comisión del sistema de pago que se utilice en la plataforma en cuestión. Hay muchos sistemas de pago y cada plataforma puede usar uno o varios de ellos. Hablo de Stripe, PayPal o un TPV virtual de un Banco. Esta comisión es igualmente a riesgo y puede variar mucho en importe. Por norma general va de un 1% a un 4% dependiendo del sistema utilizado.
Es muy importante tener en cuenta el importe de esta comisión del sistema de pago ya que se descontará de la cantidad recaudada en el momento en que se reciban los fondos.
En tercer lugar pueden haber transacciones fallidas
Según sea el sistema de pago puede ocurrir que fallen algunas de las transacciones realizadas por las personas que apoyen el proyecto durante la campaña. Eso puede ocurrir por falta de saldo, por robo de tarjeta bancaria o por otros motivos. En cualquier caso, por prudencia, es conveniente calcular que pueden fallar hasta un 5% de las transacciones.
Por prudencia es conveniente tener en cuenta que un porcentaje pequeño de las aportaciones en la campaña pueden finalmente no recaudarse y, por tanto, verse descontadas de la cantidad total recaudada.
En cuarto lugar pueden existir costes adicionales a descontar
Cuando hablamos de campañas de crowdfunding de inversión, como ya repasamos en el capítulo de la guía básica dedicado a los costes, pueden llegar a descontarse partidas de coste adicionales. Hablo de partidas que provengan de la formalización de la ampliación de capital en la que las personas que hayan participado en la campaña pasen a ser nuevos inversores del proyecto objeto de la misma.
En el caso particular del crowdfunding de inversión pueden haber partidas adicionales que sean descontadas de los fondos recaudados, como por ejemplo los costes notariales de formalizar la ampliación de capital realizada tras la campaña.
Por lo tanto son diferentes los costes que se descuentan en casos de crowdfunding de recompensa como Pildorea que en casos de crowdfunding de inversión como la segunda campaña de Pono Music.
¿Qué debe tenerse en cuenta para hacer un buen uso de los fondos recaudados?
Una vez se reciben los fondos finalmente recaudados se deben tener en cuenta los costes de producción y envío de recompensas en el caso del crowdfunding de recompensa. Cuando hablamos de crowdfunding de inversión de lo que se trata es de tener en cuenta el plan de inversión y de negocio presentado a los inversores.
Los fondos deberán usarse, en cualquier caso, para llevar a cabo aquello que se ha comprometido en la campaña con las personas que los aportan.
Los costes de producción de las recompensas
Las recompensas en crowdfunding pueden ser productos, servicios o experiencias que se ofrecen a cambio de las aportaciones. Pero el crowdfunding no es una tienda online, no se debe usar para vender productos, servicios o experiencias ya creados sino que éstos deben crearse gracias a la colaboración de las personas que participen en la campaña.
Por eso es tan importante el coste de producción de las recompensas, si por ejemplo una campaña recauda 5.000 euros y el creador recibe 4.550 euros (los 5.000 euros menos el 5% de comisión de la plataforma y un 4% de comisión de sistema de pago), con dicha cantidad se deberán producir las recompensas comprometidas con los mecenas.
¿Qué tipo de recompensas? Pueden ser desde gafas de sol a cascos de inmersión 3D.
Los costes de envío, embalaje o distribución de las recompensas
Por supuesto una vez se producen las recompensas pueden haber otros costes importantes sobretodo relacionados con la logística. Hablo del embalaje, el envío y otros posibles costes de distribución. Son un coste muy importante a tener en cuenta como ya comenté en el capítulo de la guía dedicado a los costes en crowdfunding.
No es únicamente importante tener presente que con los fondos finalmente recaudados hay que producir las recompensas sino que es imprescindible tener en cuenta que hay que enviárselas a los mecenas.
Los costes fiscales
Tampoco puede descuidarse el control del coste fiscal en crowdfunding. Si se entrega un producto, servicio o experiencia esta entrega, aunque sea con compra anticipada, se considerará una venta a nivel fiscal. Por lo tanto se entenderá que se genera un IVA por dicha venta.
Cuidado al calcular el coste del IVA porque hay un IVA repercutido del 21% en cada venta pero también existe un IVA soportado que es el aplicado por los proveedores que hayan colaborado en la producción de las recompensas.
El coste fiscal será el IVA repercutido menos el IVA soportado, por tanto si creamos, por ejemplo, un monopatín por crowdfunding, el coste fiscal será el 21% de cada venta menos el IVA que nos apliquen los proveedores de materiales y todos los que participen en el proceso de producción y nos facturen con IVA.
Los costes de cumplir el plan de negocio para conseguir el ROI
Para acabar en el caso particular del crowdfunding de inversión, los fondos que recibamos son una inversión que han realizado las personas que participan en la campaña para que se lleve a cabo un plan de negocio. Y dicho plan de negocio debe generar unos resultados que permitan a su vez generar un ROI (retorno de la inversión).
El ROI comprometido con los inversores en un crowdfunding de inversión es un compromiso firme que debe cumplirse, en la medida en que sea posible, mediante el uso de los fondos recaudados.
Dicho ROI puede significar multiplicar por 2, por 3 o incluso por un múltiplo mayor, la cantidad invertida por las personas participantes en la campaña.
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Hola,
Queremos hacer una campaña de kickstarter para un juego de cartas, pero no estamos seguros de los costes fiscales a incluir. Un conocido hizo una campaña para un juego de mesa en la que le restaron un IVA del 21%, y también tiene que pagar el impuesto de sociedades que es un 20%. En total suma 41%, lo que es me parece una barbaridad.
Qué hay que contar? Es necesario constituir una empresa?
Gracias
Hola, Luis: Gracias por tu comentario.
Te comento a continuación y te adelanto que hay un artículo mío que puede ayudarte y del que te paso el enlace al final de mi respuesta.
Si tu amigo tuvo costes de producción (materiales, impresión, artista ilustrador de las cartas) esos proveedores debieron hacerle una factura con IVA. El IVA a pagar en ese caso debería haber sido el 21% sobre lo recaudado menos el 21% sobre sus costes de producción. Total, que no habrá pagado un 21% de IVA sino menos de dicho porcentaje.
En el caso del Impuesto de Sociedades se tributa por las rentas (beneficios) del ejercicio, habrá pagado un 20% (o el porcentaje que le tocase) en función del total de beneficios de su sociedad en ese año. Con lo cual no es directamente imputable a la campaña, a no ser que lo único que haya hecho en ese año hayan sido las cartas y su empresa haya tenido beneficios.
Piensa que con el crowdfunding lo que se hace es facturar, no tener beneficios. A lo que se recauda se le deben restar unos costes y los impuestos de los que hablamos gravan el valor añadido (margen de ventas) o las rentas (Impuesto de Sociedades o IRPF), no la facturación que se genera.
Te paso el artículo al que te hacía mención al inicio de mi comentario: https://vanacco.com/impuestos/
Seguimos en contacto, ¡un saludo!